Esta antología reunió a dieciséis autores en torno a la figura de Selena, aunque sería más preciso decir en torno a lo que significó para cada uno la época que su música (y su muerte) trae a nuestra memoria.
Es evidente que, si bien el imaginario de las canciones de Selena aportaba elementos para la ficción pura, igualmente condujo algunos textos hacia asuntos que ya en los noventa eran dolorosos y no han hecho sino agravarse. En busca de la identidad musical de la texana, pero sin querer simplificarla en una lista de hits, la lógica de colaboración fue tomar como base el repertorio del concierto del Astrodome de Houston, su actuación más célebre, tal vez por ser la última. En ese concierto se enfrenta a un público inusual: canta en Houston, pero no necesariamente para los houstonianos. Así que durante toda su actuación les habla a ellos, a los que están ahí, les dice: Oye, Houston, México. Nuestro libro también quiso ser incluyente, diverso; el resultado va de la crónica personal a la poesía experimental, de la ficción realista a la futurista, del humor a la violencia, y presenta el trabajo de autores nóveles y reconocidos. Intenta ser un punto de encuentro entre lo disímbolo en apariencia: un libro fronterizo en más de un sentido.