La presente obra es un análisis de la crisis filosófica de nuestro tiempo y el cuestionamiento sobre la conveniencia de renovarse. En tal caso, el texto esboza las posibilidades de hacerlo desde la hermenéutica analógica. De igual modo, se presentan reflexiones en torno a una teoría de la interpretación, articulada con el lado analógico del razonamiento y de la hermenéutica. En primer lugar, esta renovación conviene hacerse desde la antropología y la sociedad. A partir del concepto de analogía se accede a algunas aplicaciones de la racionalidad analógica, partiendo del carácter simbólico de la filosofía, así como de su interpretación: los mitos, los ritos y el arte. Por ello, esta reflexión abarca no solo la filosofía, sino todas las disciplinas humanísticas. Posteriormente, la reflexión se traslada al ámbito de las virtudes, la ética, la epistemología y la pedagogía. Es una reflexión interdisciplinaria donde se esboza la propuesta de un realismo analógico, como parte de un “nuevo realismo” que se preocupa por renovar la filosofía actual. Con ello, finalmente, se desemboca en una reflexión estética capaz de reinterpretar el arte, la historia, la literatura y las humanidades en general.