En estos Diarios Zen 1969-1982, Matthiessen describe el intenso proceso interior de su descubrimiento del zen, su práctica y su laboriosa asimilación hasta el momento de convertirse en monje zen. El relato de su evolución interior —desarrollado en los marcos físicos de los Estados Unidos, Nepal y el Japón— se combina con interesantes explicaciones de la historia y las ideas fundamentales del zen, todo ello narrado con la maestría, el nervio y la amenidad del autor de El árbol en que nació el hombre. «Uno de los mejores escritores de los Estados Unidos.» Don Delillo. Peter Matthiessen es un artista original y poderoso producido un conjunto de obras tan impresionante como el de los mejores escritores de nuestro tiempo.» William Styron. En agosto de 1968, a su regreso de un viaje por África, Peter Matthiessen se encontró en la puerta de su casa con tres maestros zen japoneses, invitados de su esposa, que empezaba a iniciarse en esta disciplina espiritual. Al cabo de trece años, Matthiessen era ordenado monje budista. Estos Diarios Zen 1969-1982 son el relato del periplo interior y exterior del autor durante estos trece años y reflejan, con sinceridad y con la habitual maestría narrativa de Matthiessen, sus vivencias, dudas, dificultades, fracasos y triunfos en su búsqueda espiritual. Las experiencias narradas en estas páginas tienen por marco físico los Estados Unidos de América, el Nepal y el Japón. El relato del proceso interior del autor se combina hábilmente con las explicaciones sobre los métodos y conceptos fundamentales del zen, así como con las apasionantes historias de los grandes maestros del pasado y el presente; paralelamente, el relato de Matthiessen refleja el interesante proceso de introducción del zen en los Estados Unidos y la consiguiente confrontación de dos mentalidades tan diferentes como la oriental y la occidental, con lo que estos Diarios constituyen también un interesante documento sobre el diálogo entre civilizaciones y culturas. El texto de Matthiessen tiene el frescor, la viveza y la inmediatez de lo vivido. Su extraordinario talento de escritor sabe transmitirnos todos los matices de una experiencia rica y profunda, la realidad de ambientes, lugares y personajes y, por encima de todo, y paradójicamente, algo de esa sabiduría que no se deja encerrar en palabras que es el zen.