Alain Badiou y Jean-Luc Nancy son los últimos herederos de la gran tradición de la filosofía francesa del siglo XX y XXI. Ahora bien, es imposible
pensar la filosofía francesa por fuera de la influencia de la
filosofía alemana. De Adorno y Benjamin a Heidegger y Marx,
pasando por Freud y Nietzsche, por un lado; y por otro, de
Sartre a Foucault, de Derrida a Althusser, llegando a Deleuze
y a los propios Badiou y Nancy, el ensayo francés puede leerse como una reescritura, un debate, un diálogo, una crítica y
una apropiación de la tradición filosófica alemana.
La tradición alemana en la filosofía traza ese mapa, que no
es otro que el del camino llevado a cabo por un pensamiento
tan exigente y riguroso como radical.