(España 1876 – Francia 1910), hijo de familia aristocrática, partió de Madrid en 1902 tras el escándalo de un intento por batirse a duelo. Desembarcó en Buenos Aires. Comenzó a dedicarse al periodismo aunque nuevamente intenta acometer a duelo entonces sigue su estrella y en 1904 se instala en la ciudad de Asunción. Pudiendo disfrutar de los dividendos del capital familiar, en Paraguay se comprometió con la realidad de los mensúes, los pobres, los esclavos, los yerberos. Adoptó el Paraguay como a su cuna. Con el corazón en Asunción; entre Buenos Aires, el Mato Grosso brasileño y Montevideo, su compromiso político abrazó el anarquismo como ideología, desde donde trabajo con gusto exquisito la orfebrería de las palabras desde las barricadas.
Presa de una tuberculosis mortal partió a Europa en busca de sanación pero la muerte lo alcanzó en 1910. Tenía 34 breves años y suficiente combustible para la leyenda.
Rafael Barrett sólo publicó en vida, con muy buena recepción, “Moralidades actuales” en 1909. Al año siguiente de su muerte se dará a conocer “El dolor paraguayo”. El resto de su obra, dispersa en diversas publicaciones del Río de la Plata fue pacientemente compilada, re editada, difundida y recomendada con especial cariño generalmente por manos libertarias, para escándalo de los poderosos, más allá de las conveniencias del mercado editorial.