Carácter tiene tres protagonistas: un padre, una madre y un hijo. En cierto sentido, el resto de los personajes, por muy importantes que parezcan, sólo sirven para acentuar la granítica unidimensionalidad de esos tres. Esto le da a la narración un aire mítico; cada uno de los protagonistas es esencialmente incapaz de comunicarse con los otros: está atrapado en su propia naturaleza sin posibilidad de escape. No conozco otro relato cuyos personajes se sometan de forma tan brutal al yugo de la información retenida, tanto que la trama (una batalla sorda entre padre e hijo donde la madre, que en su día se negó a casarse, jamás abandona su mutismo) parece desarrollarse en una cápsula de silencio. El padre es un monstruo salido de la tragedia griega; la madre, una santa de proporciones casi aterradoras; y el hijo debe vencer al padre que intenta destruirlo (aunque tampoco esto es seguro al c...leer más