TIBOR DÉRY (1894-1977), nació en Budapest en el seno de una próspera familia de ascendencia judía. En 1919 se unió al Partido Comunista y sirvió en el infortunado gobierno revolucionario de Béla Kun, que cayó antes de final de año. Durante la mayor parte de los siguientes tres lustros, vivió en el exilio, hasta su regreso a Hungría en 1935. Aunque en un principio fue bien considerado por el gobierno comunista de la posguerra, en 1953 Déry ya había sido expulsado del partido por las críticas a su política cada vez más represiva. Posteriormente apoyó al gobierno reformista de Imre Nagy y, tras la represión soviética de la revuelta de 1956, fue condenado a nueve años de prisión. Escritores de todo el mundo, entre ellos Albert Camus, Jean-Paul Sartre, E. M. Forster, Rebecca West y Alberto Moravia, se unieron en su defensa y en 1960 no sólo se le concedió la amnistía, sino que también pudo volver a publicar y a viajar con relativa libertad. Entre las obras más importantes de Déry destacan El ajuste de cuentas, Monsieur G.A. en X y Querido suegro.