Nací en el barrio de Horta, a las afueras de Barcelona, cerca de Collserola. Collserola y los lugares que visitaba con mis padres y el grupo escolta fueron los escenarios de mis primeras aventuras en la naturaleza. Anhelando más naturaleza, estudié Biología Ambiental y viajé a Ecuador en el último año de carrera. Ecuador es un país cautivador, cruzado por la cordillera de los Andes, con kilómetros y kilómetros de selva a ambos lados de las montañas. Tuve la increíble oportunidad de adentrarme en la selva y trabajar como primatóloga, siguiendo de cerca todo tipo de monos y observando su comportamiento con prismáticos. Me sentí muy orgullosa de poder realizar un trabajo parecido al que hizo Jane Goodall, a quien he admirado desde niña. Como Jane, también fui a la universidad para cursar estudios de posgrado y adquirir un conocimiento más formal sobre primatología. En mi caso, cursé un máster en Antropología Biológica en la ciudad de Madison, al norte de los Estados Unidos. Y, al igual que Jane, ahora me ha llegado el momento de abandonar la selva y la academia para conectar con los niños y niñas y los jóvenes de Madison, de Barcelona y de todas partes.