El inspector Ray Lennox ha resuelto el caso de asesinato de una niña de siete años. Ha sido recompensado con unas vacaciones para superar su obsesiva implicación en el caso y su depresión posterior. Lennox viaja con su novia a Miami, y se olvida de la cocaína y el alcohol. Pero, después de una discusión, va a un bar, donde se le acercan dos mujeres con cocaína y ganas de fiesta. Los tres acaban en el piso de una de ellas, intentando no despertar a Tianna, la hija que duerme en su habitación. A la mañana siguiente, tras una brutal pelea y la desaparición de la madre, Lennox se encontrará a cargo de Tianna, una precoz lolita de diez años, amenazada por una red de pedófilos, y deberá enfrentarse a los fantasmas del pasado.