Hace cerca de tres mil años, en el norte de la India, floreció una civilización de una extraordinaria riqueza, que sin embargo no dejó reliquias arquitectónicas ni artísticas. Y es que su fortuna no se basó en las conquistas ni en la acumulación de tesoros sino en la insuperada sofisticación de una serie de textos en torno al Veda (el saber). Textos que, en su mayor parte, son minuciosas prescripciones para ejecutar los ritos, desde el más sencillo hasta el más complejo: el sacrificio. Calasso, que ya se dedicó a la religión de la India antigua en un libro memorable, Ka, vuelve ahora sobre ella para centrarse precisamente en la cuestión del sacrificio. ¿Qué es? ¿En qué consistía? ¿Cuál es la diferencia entre la mera violencia ejercida sobre un ser y la esencia del sacrificio? ¿Qué valor le damos hoy a ese concepto?