En este volumen se aborda un problema nuevo del sistema política mexicano: el intersticio entre la implosión del proyecto de democratización “neoliberal” y la emergencia de un régimen hiperpresidencialista. Partiendo de la premisa de que la elección presidencial del 2 de julio de 2018 fue un parteaguas en la historia del sistema político mexicano moderno, los trabajos aquí reunidos examinan los alcances y limitaciones del ejercicio hiperpresidencialista para crear nuevas bases institucionales para la vida política en México, incluyendo un sistema de partidos y de competencia electoral a la vez funcional y representativo de las preferencias de la ciudadanía. Los autores examinan los cambios en la arquitectura de la división de poderes, tanto el Congreso como el Poder Judicial, y la configuración “post crisis” del sistema de partidos, incluyendo el partido oficial. Igualmente se aborda ...leer más