El profundo movimiento de Mayo del 68 se dirigía a la política en sí misma y al capitalismo en sí mismo. Su vehemencia arremetía contra la democracia gestionaria, pero, más aún, en él se perfilaba un interrogante acerca de la verdad de la democracia. La verdad de la democracia es esta: no se trata de una forma política entre otras, a diferencia de lo que fue para los antiguos. No es en absoluto una forma política, o bien, y al menos, no es ante todo una forma política."Democracia" es, en primer lugar, el nombre de un régimen de sentido cuya verdad no puede subsumirse en ninguna instancia ordenadora, ni religiosa, ni política, ni científica, ni estética, pero que compromete por entero al "hombre" en cuanto riesgo y posibilidad de "sí mismo".Este primer sentido sólo toma un nombre político de manera accidental y provisoria. En segundo lugar, "democracia" habla del deber de inventar la p...leer más