La sociedad española ha sufrido transformaciones estructurales de convivencia que no conocieron generaciones anteriores como consecuencia de los procesos migratorios en el último cuarto del siglo pasado y a comienzos del presente. La importancia numérica de la población extranjera en España es un hecho avalado por la realidad estadística, pero también por el modo en que los medios de comunicación se han hecho eco de su presencia.
Como testigos omnipresentes y privilegiados del sentido de los flujos migratorios y de su impacto en la vida de los ciudadanos, los medios de comunicación han desempeñado un papel indiscutible en la conformación de una mirada muy particular sobre el fenómeno, haciendo visible un tipo de población extranjera a la que se ha identificado como inmigrante y a la que se ha presentado y representado, desde las narrativas inherentes a su producción y tecnologí...leer más