
Entre la presente edición y la primera (2013) se han producido nuevas modalidades, no solo en el campo de la sexualidad, sino en el lenguaje, en los efectos del lazo social a través de pantallas electrónicas, en el consumismo que nos impone la época, la política, los gigantes económicos, en fin, variantes que encontrarán en nuevos capítulos.
A mi entender, las invariantes son siempre actuales, aunque tengan otras vestiduras, otros discursos. Advertidos los analistas de lo que hoy nos rodea, no expulsemos por la puerta lo que retorna por la ventana.
La temporalidad actual se caracteriza por la prisa sin pausa con que nos agobian distintas manifestaciones por la abundante lista de “ nuevas sexualidades”.
El así llamado discurso de genero ha introducido al lenguaje nuevas entidades que aparentan ser nominaciones que garantizan una identidad. Es lo que Freud, en sus ...leer más






