
Esta vez, nuestro entrañable amigo se anima a escribir cartas a sus amistades: las libélulas, las arañas, los zorros, y también al viento, al silencio, a la luna… e incluso a sí mismo. Para ello, construye un buzón. Un día empieza a recibir respuestas y decide investigar quién es el cartero… con la ayuda de los pequeños lectores podrá descubrirlo.
Las magnéticas ilustraciones a 4 colores muy saturados de Éva Offredo, junto con la particular manera de escribir y los juegos de palabras de Alex Cousseau, llenos de una creatividad sensible y desbordante, se combinan en un libro que nos transmiten, una vez más, toda la poesía de la infancia y hace volar la imaginación de las y los peques con un toque de humor muy especial.
Un libro lleno de poesía que alimenta en los peques su capacidad innata de imaginar y los anima a familiarizarse con el lenguaje simbólico, el metalenguaje...leer más






