La sobrevivencia de los seres humanos, individual y colectivamente, depende en gran medida del conocimiento que tengan de su entorno y de ellos mismos. Una de las condiciones que hacen posible ese conocimiento es la capacidad que se denomina 'razón'.
La comunicación y las acciones coordinadas entre las personas, así como sus interacciones con el medio ambiente, son posibles en virtud del ejercicio de esa capacidad: la racionalidad. Gracias a ella, los seres humanos aprenden y manejan los lenguajes, conectan unas ideas con otras, hacen inferencias y toman decisiones, por ejemplo, acerca de qué creer y qué no creer, qué fines perseguir o qué cursos de acción tomar.
En este volumen, un grupo de destacados filósofos iberoamericanos estudia diferentes aspectos de la racionalidad. En el primer trabajo se expone lúcidamente la evolución de la idea de racionalidad epistémica en ...leer más