Pese a licenciarse como médico, Miguel Rellán es reconocido por su faceta de actor. Sus primeros pasos en la profesión fueron durante su época de estudiante en la Universidad de Sevilla, donde ingresó en el Teatro Español Universitario y fundó Esperpento, uno de los grupos de teatro independiente de mayor renombre durante cuatro años (1965-1969).

Colaboró durante varios años en una veintena de montajes teatrales. A partir de 1974, ya en Madrid, intervino en montajes teatrales, programas dramáticos y series filmadas para televisión y producciones cinematográficas, debutando con la película El perro (1979), de Antonio Isasi-Isasmendi.

También participó en El crack y El crack II, de José Luis Garci y a las órdenes de José Luis Cuerda en El bosque animado y Amanece, que no es poco. Igualmente en El perro del hortelano, de Pilar Miró.

Debe su popularidad al medio televisivo, habiendo protagonizado series de éxito como La Regenta, Menudo es mi padre o Compañeros.

La primera experiencia de Rellán como escritor fue Seguro que el músico resucita (Valdemar, 1998).