El 23 de junio de 1944, a pocas semanas del desembarco de los Aliados en Normandía y a más de mil kilómetros des distancia, cerca de Praga, se ultiman los preparativos para una visita importante. Por primera vez el régimen nazi va a consentir una visita de inspección a un campo de concentración. Los delegados internacionales quedan sorprendidos por lo que ven: jardines y parques de juego rodeados de tulipanes, un pabellón de conciertos donde una orquesta ensaya el Requiem de Verdi, un teatro concebido para espectáculos de ballet y cabaret, un café restaurante, un hospedaje bien provisto, una escuela, una biblioteca... Los prisioneros judíos aparentemente están en buen estado de salud, saludan sonrientes desde las ventanas, los niños salen de la escuela cantando en fila de a dos, el correo entrega puntualmente paquetes y cartas, las mesas están servidas y las raciones son abundantes. D...leer más