España es hoy un país sin un proyecto que aproveche su potencial. Existe un proyecto dominante en España: se trata de un proyecto, articulado por las elites y por los partidos, que no sirve, en la medida en que no establece una relación íntima con las características más importantes y fecundas de la sociedad española. España, un país relativamente pequeño, se está convirtiendo, debido a la escasa imaginación de los que detentan el poder, en un país simplemente pequeño.
Es un país que, al dejar de hablar con voz propia dentro de Europa, está perdiendo contacto con las fuentes de su propia originalidad.
España podría ser un gran país. Se lo permitiría un proyecto alternativo que aprovechara, tanto desde el punto de vista práctico como moral, aquello que distingue a su sociedad y a su cultura. Lejos de contradecir su compromiso con Europa, ese proyecto ofrecería una alternati...leer más