¿De dónde provienen las ideas? Según Platón, de otro mundo perfecto; Aristóteles, a su manera, cree otro tanto; para el cristianismo, estas surgen de la revelación divina; según los renacentistas, se generan a través de un «corazón» puro con el que se puede observar la naturaleza sin prejuicios; para los ilustrados, son lo que queda después de abandonar supersticiones varias. El mundo decimonónico, sin embargo, comienza a percibirlas como pensamientos contaminados siempre de clasismo o ideología —Marx, Weber—, o de complejos personales enterrados en el subconsciente —Schopenhauer, Freud—. Ahora bien, es la interpretación darwinista la que cobra más fuerza hoy en día: las ideas prosperan si ayudan a la supervivencia.
Según el autor, este discurso que busca su justificación en la biología actual yace en realidad sobre una plataforma metafísica, la cual sustenta la retórica del co...leer más