Su nombre real es Larbi Layachi. Cuando Paul Bowles se encontró con él en 1960, paseando por la playa de Merkala, trabajaba de vigilante en un café y no sabía leer ni escribir, pero sabía contar historias. En ellas se reflejaban dos de los temas más caros al escritor estadounidense: el fatalismo absoluto y el choque cultural entre el mundo occidental y el árabe. Esa afinidad, además de la calidad literaria de los relatos, infuyó sin duda en el aliento que Bowles le prestó a su amigo para que siguieran reuniéndolos en un magnetofón hasta formar una novela. El resultado fue A life full of holes [Una vida llena de agujeros] que publicaría Grove Press en los EE.UU. en 1964.
Como cuenta Paul Bowles, «gracias a ese libro, Larbi, que nunca creyó posible que alguien le pagara por un "trabajo" semejante, ganó el dinero suficiente para poder buscarse una esposa». Dos años más tarde, a Layachi le aterró de tal forma la reacción del Gobierno marroquí a la edición francesa, que Bowles acabó por conseguirle un visado y lo embarcó para América escoltado por William Burroughs. A partir de ahí se pierde todo rastro de Larbi Layachi, hasta que en la segunda mitad de los ochenta, de nuevo bajo el seudónimo de Charhadi, aparecen otras dos novelas: Yesterday and Today (1985) Y A Jealous Lover (1986).