Hace unos años era muy difícil estudiar de modo objetivo la historia de la filosofía rusa: existieron muchos contratiempos a causa de la censura y de las prohibiciones burocráticas. Muchos pensadores de épocas anteriores fueron silenciados y sus obras se destruyeron o fueron guardadas en fondos cerrados inaccesibles para los lectores. La situación fue absurda: ¿cómo podría existir, digamos, la filosofía alemana de hoy si hubieran sido prohibidas las referencias a las obras de Kant o de Hegel? ¿Qu´q sería hoy la filosofía francesa si hubieran expulsado de su memoria los nombres DE Descartes o Rousseau? ¡Esta barbaridad histórica parece increible! Y sin embargo, así fue la situación espiritual en la Unión Soviética antes de la Perestroika: las obras de grandes pensadores como Soloviev, Fiodorov, Shestov, Berdiaev, Bulgakov, Leontiev, Danilevsky, Frank , Florensky, Karsavin, Lossky, Trubetskoy, Rozanov eran prácticamente desconocidas.
Durante los últimos quince años la situación cambió radicalmente: se abrieron las "mazmorras" de los fondos especiales de los archivos y bibliotecas, aparecieron muchas nuevas ediciones de los clásicos del pensamiento nacional, cada año aumenta el número de investigaciones dedicadas a la filosofía rusa. Sin embargo, el lector latinoamericano, "alimentado" durante muchos años por la historia de la filosofía marxista llegada de la exUnión Soviética a través de la editorial "Progreso", todavía no está familiarizado con los nuevos estudios que se llevan a cabo en la Rusia de hoy. La tarea del presente libro consiste en contribuir modestamente en llenar las lagunas persistentes en esta esfera. En esta colección de ensayos destacan temas como la búsqueda del sentido de la historia, la formación de etnias, los problemas de la identidad nacional, el destino de la intelligensia rusa y su exilio del país después del triunfo de los bolcheviques en la revolución de octubre, así como la crítica del utopismo.