Es necesario, y hasta urgente, enseñar hoy a «pensar como se debe», con rectitud y corrección, sin apartarse de lo real, en un esfuerzo riguroso que contrarreste el mero parecer del individuo, para alcanzar la verdad. A esta tarea se dedicó el célebre abad de Bec cuando, a principios de 1080, redactó una trilogía sobre los problemas de la verdad, la rectitud, el mal, la omnipotencia divina y el libre arbitrio. El primero de esos tratados lleva por título De veritate; el segundo, De libertate arbitrii(Sobre la libertad del arbitrio); el tercero, De casu diaboli(La caída del diablo). En De veritate, Anselmo busca iluminar la relación que existe entre la virtud moral, la verdad y la justicia, al tiempo que pretende enseñar a sus monjes cómo conectar la verdad con la vida real. Para ello propone la categoría de «rectitud», es decir, aquel camino correcto que ha de seguir todo individuo qu...leer más